Empezando el año con nuevas manos.
Ahora si, después de 5 semestres que he recibido a alumnos como practicantes, puedo decir que si: ¡Calixta tiene un programa de practicantes! Dura mínimo 5 meses máximo 1 año o lo que suceda. Este semestre mi reto fue incluir perfiles distintos a los que había tenido anteriormente. Quiero que Calixta se fortalezca por diversidad y distintas habilidades, así que ¡aquí vamos!
En esta ocasión les presento a Paulina - Pau; y José Antonio - José A. en mis anotaciones. Ambos estudian en UDEM - diseño industrial y ambos me escribieron: "Tomé cerámica aquí en UDEM y me gustaría aprender más sobre ella".
Gracias por su disponibilidad, su apertura, su energía positiva y su voluntad para aprender. Aunque ya tengan poquito más del mes, y ya se entierraron, cargaron, rompieron su primer pieza, quemaron su primer pieza y barrieron todo el taller por primera vez ¡Bienvenidos públicamente!
Pau es una chica muy expresiva. Sus ojos, sus gestos ayudan a saber como se siente. Es perceptiva y le gusta involucrarse, cree en la energía - en eso coincidimos - y siempre tiene una opinión y experiencia para compartir. En sus primeros días en el taller Pau aprendío que "los silencios son buenos" y acepto que se relaja mucho en ellos.
Su parte favorita de venir al taller es crear algo desde cero, moldearlo con sus manos, y verlo "bonito y simétrico" le causa mucha satisfacción. También ha aprendido que toma tiempo y mucha paciencia.
Define a la cerámica como: "un poco complicada... es a veces muy fácil de manejar, amigable y amorosa y a veces es sentida y difícil..."
La percepción que cada quien tiene de la cerámica va cambiando conforme se incremente la cercanía y relación con ella... lección que se asimila aquí todos los días.
Dice le gustaría aprender a aceptar que no todas las piezas se van a lograr al final, que no todo se puede controlar. La cerámica definitivamente apoyará en este aprendizaje.
En un futuro se ve en algún estado del sur de México trabajando de la mano con artesanos para lograr una colaboración de diseño; y así comenzar una iniciativa que apoye tanto a artesanos como a diseñadores y lograr el comercio justo. Que importante todo esto.
A la hora de comer, se siente feliz si esta disfrutando de unos buenos tacos con papa asada, también un "super sandwich gigante" con mucho aguacate.
Pau esta siendo involucrada poco a poco con cada técnica en el taller, ya acepto que vivirá unos meses con las uñas bien cortitas. ;)
¡Gracias Pau!
José Antonio tiene muchos intereses. Cuando nos conocimos en la entrevista, aprendí varias cosas. Originario de Los Mochis Sinaloa y con orgullosa decendencia oriental - japonesa, José Antonio es un joven curioso en los procesos; tanto mentales, de ideas, de las personas, de producción y de diseño.
Lo que más ha disfrutado de estar en Calixta hasta el momento es estar en contacto con los materiales, sentirlos. Dice disfrutar los momentos para pensar mientras se realizan actividades rutinarias como amasar o mezclar material.
Define a la cerámica como: "un reflejo de nuestra persona, si reacciona con los PH naturales de nuestra piel y éstos a su vez reaccionan con nuestras emociones. La cerámica es un reflejo directo de lo que somos y lo que sentimos"
No lo pude haber definido mejor.
José Antonio se confirma como una persona paciente, hay técnicas como la de "pinching" que son tan libres que le gustaría tener más estructura para sentirse más cómodo en ella - acepta que hay que practicar mucho antes de decir dominar una técnica. Aquí la paciencia consigo mismo será muy útil.
Disfruta el ambiente de trabajo en Calixta, también la comida italiana, la comida oriental casera (no la comercial) y se ve en una maestria de Diseño biomimético en los próximos años.
Además de estar en el taller, también esta apoyando con algunas actividades que tienen que ver con comunicación, fotografía e imagen. Hablarlo con él me obliga a replantearme lo que antes pensaba y lo que ahora quiero para Calixta. Y por eso estoy muy agradecida.
Le gusta todo lo que esta bien medido y exacto --- y por eso pronto lo sumergiré en el proceso de esmaltes.
¡Gracias José Antonio!
Ya tuvimos nuestro primer desayuno/junta/festejo, estoy segura habrá otros; aunque nadie cumple años en los meses que siguen, algo inventaremos.
Luli sigue conmigo en Calixta. Lo que significa que ahora somos 4 en el taller. Esto me emociona y a la vez me exige. Pensar en el detalle del día a día, además de mantener una visión a mediano y largo plazo es algo que aún estoy aprendiendo. Gracias a estos tres jóvenes por darme la oportunidad de practicar.
¡Gracias a ti por leerme!